Las enfermedades circulatorias son aquellas que inciden en el sistema circulatorio, que está compuesto por el corazón y los vasos sanguíneos (venas, arterias o capilares), y además afectan al sistema linfático ya que está muy relacionado con los vasos sanguíneos, por lo que cualquier afectación a estos dos sistemas dificulta o interfiere con la correcta circulación de la sangre.

El correcto flujo de la sangre es esencial para el buen funcionamiento del organismo, ya que esta se encarga de transportar los nutrientes necesarios a todas las células del cuerpo. Las consecuencias de no tratar adecuadamente la mala circulación sanguínea pueden llegar a ser muy graves, incluso pueden comprometer otros órganos (como el hígado y los riñones) o bien, la persona puede llegar a sufrir un infarto, entre otras complicaciones.

Para evitar esto, es sumamente importante llevar un estilo de vida saludable y eliminar todos los excesos. Esto, sumado a una evaluación y diagnóstico médico temprano ayudará a reducir las molestias derivadas de este padecimiento.

Dentro de las causas principales también se puede mencionar las siguientes:

  • Obesidad.
  • Diabetes.
  • Sedentarismo.
  • Alcoholismo.
  • Aterosclerosis.
  • Coágulos de sangre.
  • Venas varicosas.
  • Enfermedad de Raynaud.
  • Enfermedad de las arterias periféricas.

Para conocer más sobre la prevención, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades circulatorias, acude con el médico angiólogo para obtener una atención integral y especializada.